En la mañana de hoy, la Gendarmería Nacional reprimió una protesta de trabajadores de la línea 60 de colectivos. El secretario de Seguridad, Sergio Berni, afirmó que “cuando intentaron cortar el tránsito, la Gendarmería les explicó que iban a cometer un delito federal y decidieron cortar igual, por lo tanto di la orden para que desalojaran usando los protocolos que utilizan nuestras fuerzas federales”.
En el operativo la Gendarmería disparó balas de goma de manera indiscriminada hacia los manifestantes, inclusive desde arriba de la Panamericana hacia trabajadores que estaban en la ruta 197. El uso de las balas de goma para dispersar a los participantes de las protestas está prohibido por los “Criterios Mínimos para el Desarrollo de Protocolos de Actuación de los Cuerpos Policiales y Fuerzas de Seguridad Federales en Manifestaciones Públicas”, sancionados por la resolución 210-11 del Ministerio de Seguridad de la Nación. Además, la Gendarmería utilizó pistolas lanzagases y agresivos químicos cuyo uso para evitar el corte del tránsito también está prohibido por la misma resolución. Como resultado, alrededor de 20 personas fueron heridas, entre ellas participantes de la protesta y trabajadores de prensa.
Los “Criterios Mínimos” que hoy fueron incumplidos fueron desarrollados como parte de la política de no represión de la protesta social que impulsó el gobierno de Néstor Kirchner y fueron ratificados por la ministra de Seguridad, Cecilia Rodríguez, luego de que se difundiera la intervención ilegal del comandante mayor Juan López Torales en un operativo irregular en 2014.
El operativo de esta mañana se puso en marcha sin antes promover un canal de negociación. Este conflicto laboral, que se profundizó en junio de este año a partir del despido de 53 trabajadores por parte del grupo D.O.T.A. S.A, requiere la apertura de espacios de diálogo que faciliten su resolución política y no del uso de la violencia contra los manifestantes.