Hemos actualizado nuestra plataforma Protestar es un derecho con nuevos videos, artículos y entrevistas aportados por activistas, periodistas y expertos de todo el mundo. Esta alianza editorial explora la fuerza de las manifestaciones y la diversidad de facetas y vínculos entre derechos humanos y protesta social.
Se destacan contenidos sobre, por ejemplo, la criminalización de la protesta en Europa, el impacto del extractivismo y de los agronegocios en América Latina y la lucha exitosa de ambientalistas contra las leyes antiprotesta en Tasmania. Otros artículos abordan la militarización del control policial de las protestas, las razones que explican la importancia de la protesta para la democracia y la represión estatal del pueblo mapuche en la Argentina.
Nuestra idea con este proyecto ha sido reunir voces que muchas veces no están en contacto, ya sea porque pertenecen a campos de trabajo e intervención diferentes, como por las distancias geográficas, las diferencias idiomáticas o por la segmentación que a veces atraviesa a los debates del norte y los del sur. Esperamos que esta plataforma común fomente más intercambios que superen esas brechas, en un momento en el que se multiplican las movilizaciones a nivel global y a las que los Estados suelen responder con violencia.
El CELS y la ACLU (American Civil Liberties Union) son dos de las trece organizaciones que integran la red INCLO (International Network of Civil Liberties Organizations). La defensa del derecho a la protesta es un tema central en el trabajo de las tres organizaciones.
Muchos otros miembros de la INCLO participaron en el proyecto Protestar es un derecho: Association for Civil Rights in Israel (ACRI), Canadian Civil Liberties Association (CCLA), Dejusticia de Colombia, Egyptian Initiative for Personal Rights (EIPR), Hungarian Civil Liberties Union (HCLU), Kenya Human Rights Commission (KHRC) y Legal Resources Centre (LRC) de Sudáfrica.