El 2 de julio comenzó el juicio oral en la causa “Las Marías” para esclarecer las responsabilidades en los secuestros de delegados del Sindicato de Trabajadores de Industrias de la Alimentación (STIA) y Federación Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (FATRE) durante la dictadura cívico militar. El juicio que se desarrolla ante el Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Corrientes tiene un imputado, Héctor Torres Queirel, ex intendente de facto de Virasoro, dueño de la Estancia María Aleida, lugar donde se produjo la desaparición de la única víctima por la que está acusado: Marcelo Peralta, ex trabajador rural de Las Marías. A Queirel se lo acusa de la privación ilegal de su libertad el 29 de junio de 1977.
En la década de 1970, los trabajadores rurales e industriales de la empresa Las Marías se organizaron gremialmente y canalizaron numerosos reclamos por mejoras en los salarios y las precarias condiciones de trabajo. En 1974 realizaron una huelga de gran impacto nacional y forzaron a la empresa a considerar algunas de sus reivindicaciones.
La dictadura cortó el proceso de movilización obrera mediante la represión de toda actividad de carácter político y gremial y, en especial, mediante el secuestro de más de una decena de trabajadores de Las Marías. Luego, entre febrero y julio de 1977, otros ocho trabajadores fueron privados ilegalmente de su libertad: dos de ellos permanecen desaparecidos.
La empresa yerbatera pertenece al grupo Navajas Artaza y existen evidencias de la responsabilidad de personal directivo y jerárquico de la empresa en esos delitos, en particular de quien era su presidente en ese momento Adolfo Navajas Artaza. El aporte se tradujo en brindar información sobre trabajadores que molestaban a la empresa, recursos logísticos y materiales a las fuerzas armadas.
Las investigaciones por los delitos de los que fueron víctimas los trabajadores de Las Marías se fueron desarrollando desde hace doce años en distintos juzgados. Tuvieron varios pedidos de elevación a juicio, que fueron postergados permanentemente. En esos avances difíciles de la causa, Navajas Artaza fue sobreseído con rapidez (una veintena de jueces se excusaron para no intervenir) . Esas dificultades hablan de los obstáculos y resistencias para avanzar en el esclarecimiento de la intervención de directorios y empresarios en el terrorismo de Estado.
En este enlace podés leer y descargar la Parte V de la investigación Responsabilidad empresarial en delitos de lesa humanidad, en donde se analiza Las Marías.