Chela y Emilio jugaron un papel fundamental en el movimiento de derechos humanos argentino. La dirección de su departamento en la avenida Santa Fe fue un punto geográfico de reunión para muchos familiares de personas detenidas-desaparecidas.
Chela fue una madre de la plaza desde los orígenes de la organización y viajó fuera de la Argentina para denunciar el terrorismo de Estado. Emilio fue vicepresidente de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH). En 1979, ambos fundaron el Centro de Estudios Legales y Sociales junto a Augusto y Laura Conte, Boris Pasik, Carmen Lapacó, Alfredo y Élida Galletti, José Westerkamp y Noemí Labrune. Todos eran madres y padres de presos políticos y detenidos desaparecidos.
Emilio fue el primer presidente del CELS, hasta su muerte, hace 20 años, el 21 de diciembre de 1998. Chela murió diez años después, el 15 de marzo de 2008.
Para conocer más sobre su trabajo, el Fondo “Archivo Personal Emilio Fermín Mignone” reúne materiales de valor histórico y puede consultarse en el CELS.