El 2 de julio un tribunal de Miami declaró al marino Roberto Bravo responsable de los fusilamientos de Eduardo Capello, Rubén Bonet y Ana María Villarreal de Santucho y del intento de ejecución extrajudicial de Alberto Camps, ocurridos en la base Almirante Zar de Trelew en agosto de 1972. La sentencia en el juicio civil, que acompañó el CELS fue a pocos días de cumplirse 50 años de los hechos. El miércoles 24 de agosto, como parte de las conmemoraciones de la masacre, realizamos una charla en la que conversamos en vivo con abogades y familiares. En el encuentro se compartieron sobre las estrategias y desafíos del caso, la experiencia para todes en Estados Unidos y la situación actual del pedido de extradición de Bravo.
Durante la charla, Sol Hourcade, coordinadora del equipo Memoria, verdad y justicia del CELS y Claret Vargas, integrante del Center for Justice and Accountability (CJA), compartieron detalles acerca de la complejidad de trasladar este proceso de memoria a Estados Unidos. Ambas relataron cómo fue explicar los detalles del proceso penal en la Argentina y cuáles fueron las estrategias para la presentación de pruebas ante un jurado que tenía pocos conocimientos sobre las dictaduras en Latinoamérica.
Luego de eso, Mariano Camps y Eduardo Capello, familiares de las víctimas de la Masacre de Trelew, relataron cuáles fueron sus roles en el juicio en Miami y cómo lo vivieron en relación al proceso de justicia del 2012 en Argentina. Destacaron la experiencia de escuchar la declaración del sobreviviente Alberto Camps personificada por un intérprete estadounidense y el impacto que les provocó a ellos y al jurado escuchar ese testimonio.
Durante la charla también se compartieron algunos documentos que habían dado indicios de la sentencia, así como los testimonios de Ajay Krishnan y Laura Lind, integrantes del equipo jurídico del Estudio Keker, Van Nest & Peters, quienes participaron como litigantes en Estados Unidos.
El encuentro también fue una oportunidad para valorar la lucha de las distintas generaciones de les familiares de la masacre durante estos 50 años, recordar lo vivido en los distintos actos los últimos días y compartir el video de memoria colectiva que el CELS realizó con les nietes de les fusilades el 22 de agosto de 1972.