La jueza María Soledad Larrea, a cargo del Juzgado Contencioso Administrativo 21 de CABA, dispuso que se conforme una mesa de diálogo con representantes del Ministerio de Salud, de Espacio Público y de Infraestructura de la Ciudad, el Ministerio Público Fiscal, el Ministerio Público Tutelar y el CELS. El objetivo de la mesa será establecer de manera consensuada un diagnóstico de las necesidades más urgentes para la prevención y control del dengue y un cronograma de cumplimiento. Además, los referentes gubernamentales tendrán que brindar informes semanales a la justicia sobre el avance de las medidas.
Esto surge en respuesta a un recurso de amparo colectivo contra el gobierno de CABA para que adopte las medidas necesarias ante la epidemia de dengue más grande de la historia de la Ciudad de Buenos Aires. La falta de políticas concretas y focalizadas para evitar la propagación del mosquito que contagia el dengue sumado a la ausencia de un plan de vacunación ponen en riesgo a la sociedad, pero sobre todo a las personas con menos recursos y a trabajadores y trabajadoras de la salud.
Además, realizamos pedidos de informes a la provincia de Buenos Aires y al gobierno nacional. A la provincia le solicitamos información sobre la implementación del “Plan de preparación y respuesta ante la contingencia de dengue y otros arbovirus 2022-2023” y su actualización para 2024 considerando el aumento de casos; el grado de cumplimiento de metas y objetivos de esa política; las medidas ejecutadas para reforzar el sistema de salud en sus diferentes niveles, la producción de repelentes, la administración de vacunas y las medidas de prevención a mediano y largo plazo. Al Ministerio nacional se le efectuaron preguntas para conocer las medidas de prevención de enfermedades transmitidas por mosquitos, en ausencia de información pública y las medidas adoptadas para avanzar con la implementación de una estrategia focalizada de vacunación contra el dengue con vacuna Qdenga, tal como se lo ha recomendado la Comisión Nacional de Inmunizaciones (CoNaIn) del propio Ministerio.
Desde 2022, el gobierno porteño cuenta con el “Plan Estratégico-Operacional Integrado Prevención, control y vigilancia de enfermedades transmitidas por el mosquito aedes aegypti” que propone una serie de puntos clave para evitar la propagación de la enfermedad. A pesar de contar un plan con acciones claras destinadas a prevenir el dengue y además teniendo información previa vinculada al pico histórico de casos no adoptó todas las medidas necesarias a su alcance para proteger el derecho a la salud de la población.
La situación que se vive en los hospitales y centros de salud de la Ciudad de Buenos Aires es desoladora. Es la epidemia de dengue más grande que ha tenido la ciudad y se está atravesando sin los cuidados necesarios.
Repelentes corporales y de ambiente escasean en el mercado y sus precios son inaccesibles para gran parte de la población. En los hospitales y centros de salud no disponen de ellos ni de tules y mosquiteros para proteger a quienes están trabajando y recibiendo atención, y menos aún para proveer a la comunidad de esos insumos básicos de cuidado.
El pedido realizado en el amparo busca que el gobierno de la CABA implemente acciones de limpieza y eliminación de recipientes y sitios donde se alojan los huevos del mosquito, en todo el perímetro de los hospitales públicos, centros de salud, escuelas públicas, obras públicas y privadas, y demás edificios del gobierno de la Ciudad. Además, debería promover una campaña de comunicación y educación durante todo el año que informe sobre la enfermedad y el ciclo de vida del mosquito y cuáles son las medidas de prevención efectivas; incluir en la línea 147 la posibilidad de denuncia de potenciales criaderos; elaborar protocolos de actuación y guías destinadas a diferentes públicos, que considere los diversos escenarios de riesgo, incluyendo guías de atención de pacientes para equipos de salud; proveer de repelentes en cantidad y calidad suficiente a todos los hospitales públicos, escuelas públicas y centros de salud de CABA por lo menos entre diciembre y junio; dotar de telas mosquiteras en ventanas y camas. También, pedimos que se implemente una estrategia focalizada de vacunación.
El dengue representa un riesgo serio para la salud, especialmente en áreas donde la circulación del virus es constante y la infraestructura de salud es limitada. La forma grave de la enfermedad puede provocar complicaciones como hemorragia severa, shock hipovolémico, dificultad respiratoria y fallo orgánico, que sin el diagnóstico oportuno y el tratamiento óptimo pueden causar la muerte.
La Organización Panamericana de la Salud emitió en febrero una Alerta Epidemiológica por aumento de casos de dengue en la Región de las Américas. En Argentina, desde la semana 31 de 2023 hasta la semana 14 de 2024 fueron notificados e investigados 424.491 casos de dengue. Solo en este año, desde la semana uno hasta la semana 14, ya se notificaron e investigaron 391.486 casos sospechosos de dengue en el país, considerándose como dengue 252.566 casos hasta ahora.
Más allá del impacto de la enfermedad endémica a nivel nacional, y la necesidad de coordinar acciones entre todas las jurisdicciones del país y con el gobierno federal, la CABA tiene una responsabilidad específica e indelegable en materia sanitaria que no está cumpliendo.