Este capítulo se centra en tres ejes principales para presentar un diagnóstico de la situación carcelaria y de las respuestas que se han dado desde los distintos poderes.
En primer lugar, se analizan las políticas implementadas en el ámbito de los servicios penitenciarios y los datos sobre muertes por hechos de violencia, por enfermedades y falta de atención médica. A partir de este escenario, el capítulo se concentra en el Servicio Penitenciario Bonaerense. Luego, se analiza la respuesta judicial a las denuncias de violencia, tortura y maltrato. Aquí se muestran las deficiencias estructurales en materia de acceso a la justicia de las víctimas de la violencia ejercida por las fuerzas estatales.
Por último, se desarrolla el proceso de sanción del Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura y los avances en algunos contextos provinciales de instancias de control y monitoreo.