Desde 1921 el aborto es legal para ciertos casos en la Argentina. Sin embargo, es un derecho que históricamente enfrentó y enfrenta obstáculos basados en prejuicios y en la ausencia del Estado para limitarlos. Por esos motivos es necesaria una ley que sume un sistema de plazos al ya existente de causales.
Desde agosto de 2018 al presente, al menos 15 mujeres y niñas perdieron la vida por abortos inseguros, además de clandestinos. Las muertes por abortos inseguros son una de las formas más extremas del abandono estatal, más aún cuando el aborto es una práctica de baja complejidad, que puede realizarse, en general, en el primer nivel de atención y en forma ambulatoria. Es un problema grave de salud pública.
La vulneración de los derechos sexuales y reproductivos implica la violación de otra serie de derechos: a la vida, a la salud, a la integridad física, psíquica y moral, a la autonomía, intimidad, dignidad, a estar libre de violencia y tratos crueles, inhumanos y degradantes y a la igualdad. Por eso votar por la interrupción voluntaria del embarazo es hacerlo por un derecho eslabonado a otros. Dicho de otra forma: la mitad del país no tendrá derecho a la autonomía y a la intimidad, mientras no haya aborto legal.
Índice
1
El derecho a la vida desde la concepción
2
La protección de le embrión
3
El comienzo de la vida y de la persona
4
Los derechos de las gestantes
5
La edad de las gestantes para decidir
6
Los sistemas de protección internacional
7
No es necesario reformar la Constitución para legalizar el aborto
8
Una ley que atemoriza y condena a la clandestinidad y a la cárcel
9
El sistema de causales va en contra de los derechos de las gestantes
10
Libertad de culto y derechos reproductivos: la objeción de conciencia
11
Acceso a medicamentos esenciales para la salud
12
Sobre el deber de confidencialidad médica
13
La objeción de conciencia institucional
14
La penalización del aborto y una serie de derechos humanos violados
