En la Argentina, desde hace décadas la posibilidad de comprar una vivienda se redujo drásticamente y creció la proporción de hogares inquilinos en casi todas las ciudades. Para muchas personas en nuestro país el alquiler es la única posibilidad de acceder a un lugar donde vivir.
Debido a las condiciones sociales, económicas y jurídicas, cada vez más hogares que alquilan se encuentran en una situación habitacional deficitaria, que no satisface las características de una vivienda adecuada. Para que alquilar sea una forma estable y adecuada de acceso a la vivienda deben existir protecciones suficientes para los hogares inquilinos y que se tengan en cuenta situaciones personales críticas como el desempleo o contextos excepcionales como la pandemia de covid-19.
Esta publicación, realizada en conjunto con el IDAES-UNSAM, caracteriza la situación en la que se encuentran millones de inquilines de nuestro país y sintetiza los puntos principales para políticas públicas orientadas a sustraer a la vivienda de la lógica puramente mercantil.
